Sanremo 2022

Sanremo es de esos pocos eventos no deportivos que rompen los audímetros, en este caso de Italia, una de las mayores bazas de la RAI que paraliza todo un país. Desde la vuelta de Italia a Eurovisión ha servido de una forma u otra, para elegir a su representante, con gran éxito por cierto siempre que ha ido el elegido en Sanremo.

Este año había que elegir a los sucesores de los ganadores de Eurovisión de 2021 y, por tanto, los anfitriones en Turín.

Sorprendentemente después de unos ganadores "rompedores" y rockeros, Sanremo, de la mano de Amadeus, ha vuelto a su perfil más baladista. Esto no es bueno ni malo pero deja un Sanremo poco variado. Aún así mi favorita era una balada, Ovunque sarai de Irama. Quizá su imagen diste de lo que canta, pero para mí fue ganando con cada presentación. De una primera donde capta tu atención a una quinta serata donde capta tu corazón. Puede que sea una simple canción que habla del amor... pero de las que traspasan.

Mi segunda opción sin duda se ve perjudicada por la orquesta. Sanremo siempre va con orquesta en directo y eso hace que las canciones que no son baladas y cuyos arreglos sean menos orquestales pierdan esencia en los directos. Quizá la entonación de Sangiovani no haya sido de las mejores pero este año es que se han salvado pocos. Farfalle puede parecer un tema infantil y puede serlo, pero es de esa música que engancha y que te hace bailar. Es por estas canciones, que realmente no quedan mal pero, que te hacen ver que Sanremo aún tiene algo de antiguo.

Resulta curioso que mis tres preferidos son los puestos 4, 5 y 6 de la clasificación final del festival. Y es que mi tercera opción es Emma Marrone. Esta mujer ya fue Eurovisión en una de las pocas ocasiones en que no fue el ganador de Sanremo y su directo me dejó frío porque tenía un temazo entre manos que aún sigo escuchando. Este año con un tema dirigido en orquesta por Francesca Michielini, también participante de Eurovisión otro año que no fue el ganador, Emma tenía otra perla entre sus manos Ogni volta è così, pero de nuevo su directo... Con unos primeros acordes impactantes, una letra fuerte aunque un reflejo total de dependencia emocional, su SANTE o PUTANE, es toda una reivindicación de quien tiene un bagaje emocional importante. Amo cuando Emma rompe su voz.

Antes de ir con otros de mis preferidos que han sido los dos preferidos de la "classifica", un tema que debería haber estado más arriba por el buen rollo, por recordarnos nuestros momentos felices prepandemia y recordarnos como será la postpandemia. Dove si balla de Dargen D'Amico es todo un himno a lo que nos han robado en estos dos años. Me recuerda este verano en Grecia donde parecía que esto era algo pasado. Por eso y mucho más, esta canción lo va a petar en mi spotify.

Antes de pasar a los dos mejores, un apunte a cómo, en general, se eligen los participantes. Nuevos valores, artistas jóvenes con trayectoria y viejas glorias. ¿Qué ocurre con estas últimas? Pues que te puedes encontrar a un Gianni Morandi (el Raphael italiano) cantando una canción de Jovanotti y no saber bien que estás viendo. Puedes ver a una Rettore que no sabes bien quien le recomienda vestirse así como pasa cuando ves a Loredana Berté a las que no encuentro parecido en España más allá de Leticia Sabater. El tercer puesto de Gianni supongo que tiene que ver más con haberlo petado en la serata covers con Jovanotti que su canción en sí.

Y continuamos con mi guilty pleasure, Ti amo no lo so dire, Noemi que se presentaba con un tema escrito por Mahmood, cosa que se notaba bastante. Y ¿cuál es el problema? De nuevo un directo complicado. Aún así me parece un temazo de esos que nos gustan a los que tenemos problemas de comunicación y nos hemos acostumbrado a no decir Ti amo.

Vamos con Elisa, sin duda el mejor directo, probablemente el mejor pero ha quedado segunda. O forse sei tu tiene casi todos los ingredientes para haber ganado pero con unos favoritos desde la prima serata que no logro entender aún ha tenido que ir siempre intentando salvar este obstáculo. Quella stupida voglia di vivere, que significa esas tongas ganas de vivir, me parece que dice mucho de este tema. Otra oportunidad perdida para Elisa que nunca queda mal y que ya ganó hace más de 20 años pero que nunca deja de intentarlo de nuevo.

Un bonus track para la representante española en este festival. Ana Mena y su Duecentomilla ore, compuesta por Rocco Hunt, su inseparable compañero en sus últimos éxitos, creo que pretendía ser un homenaje a esa música tradicional italiana que está en su  base, pero no ha sentado muy bien su nacionalidad, aunque también hay que decir que los directos Ana, pues... 

Ana ya ha hecho un homenaje anterior a Sanremo con Música ligera, versión de uno de los éxitos del año pasado del festival.

Y hablando de lo mejor del año pasado, para mí fueron La rappresentante de lista, con Amare que sin duda fue la revelación indie del 2021 en el festival. Un tema que te engancha, que te envuelve, con un sonido espectacular.

En cambio este año han llegado con Ciao Ciao, con un inicio prometedor musicalmente, luego no sabes con que te encuentras, por un momento no sabía si era el Tuca tuca de Raffaella, el Cantajuegos, Missiego con Cachete con cachete... Es verdad que la letra tiene mucho pero si lo comparamos con Amare... pues ¡qué decir!

Habría que hablar de Fabrizio Moro, que ya estuvo en Eurovisión junto a Ermal Meta, y que llegó como posible favorito y que ha pasado inadvertido, dúos con temas dudosos aunque parecen haber gustado o casos como Le Vibrazioni que oyendo su video eran grandes y viendo sus directos... pues son para llorar.

Antes de acabar... grandes momentos... Laura Pausini presentando Scatola, esa visión de la dicotomía ente la Laura de hoy y aquella niña que ganó Sanremo en los 90, momentos antes de hacer oficial que ella sería presentadora del Festival de Eurovisión. Esta canción me parece todo un viaje hacía el niño interior.

Que Laura presente Eurovisión es un sueño sólo empañado por la posibilidad de que hubiese sido Raffaella, artífice de la vuelta de la RAI al festival europeo, la que lo hubiese hecho. Poco homenaje he visto para ella en este Sanremo, que presentó en varias ocasiones.

Y finalmente los ganadores, Mahmood, revelación total con Soldi en 2019, junto a Blanco un joven con mucha fuerza. Sin duda su gran baza es una letra intensa, dura y una química entre ellos tremenda. Llamativo que en una sociedad tan homófoba como la italiana se consiga que una canción en la que dos tíos se miran como ellos gane Sanremo, quizá sea el mayor logro. No era mi favorita pero siento Brividi (escalofríos) al escucharla sin duda, la letra me hace pensar en tantos momentos... aceptar mentiras para seguir ahí, vivir en una prisión, no poner límites... tiene mucha miga... sin duda relaciones tóxicas, donde crees que te equivocas siempre por no dar lo que buscan y es que realmente no saben qué quieren...